La Universidad Pedagógica Nacional tiene como bandera la inclusión al sistema educativo de diversas poblaciones, dentro de las cuales están los estudiantes Sordos, por lo que decidió apostarle al proyecto “Manos y Pensamiento: inclusión de estudiantes Sordos a la educación Superior”. Entre las diferentes acciones que se desarrollan desde este espacio de prácticas inclusivas, surgió el semillero de investigación llamado “Hablemos en lengua de señas: historias de vida”, el cual busca identificar rasgos personales y aspectos contextuales que influyen positivamente en las historias de vida de Personas Sordas sobresalientes a través de la revisión de sus biografías.
En las aulas de la UPN se reúnen los días martes a las cinco de la tarde 25 personas interesadas en esta temática, de las cuales doce son Sordas; durante tres horas, discuten a profundidad distintos temas, propios de la cultura de los Sordos. “Este es un espacio de encuentro entre las dos comunidades (Sorda y oyente), eso lo vuelve muy interesante, posibilita su interacción, más cuando la Universidad, desde hace ya 20 años, tiene un proyecto de inclusión”, explicó la profesora Martha Pabón, quien lidera el semillero y pertenece al equipo docente de la Licenciatura en educación Especial.
El desarrollo de este semillero inició hace cinco años, aproximadamente, con un grupo de estudiantes oyentes que deseaban mejorar sus habilidades en el dominio de la lengua de señas y comunicarse con personas Sordas. “En el ejercicio profesional como educadores se van a encontrar con personas Sordas, pues cada vez hay más niñas, niños y jóvenes con esta condición en diferentes escenarios educativos. Por eso, se requieren maestras y maestros profesionales que los puedan acompañar, que logren enseñarles usando la lengua de señas, reconociendo la diversidad y esas otras formas de expresión que pueden verse en las aulas”, agregó Pabón.
En el año 2023 se realizó la propuesta para formalizar este espacio como semillero de investigación, y luego de que se llevaran a cabo los trámites necesarios, se obtuvo la aprobación del mismo y se consolidó con una gran acogida entre los estudiantes, no solamente de la Licenciatura en Educación Especial sino también de quienes cursan otros programas.
Jonathan Díaz, estudiante de cuarto semestre de la Licenciatura en Artes Visuales, es Sordo y se postuló junto con otros dos estudiantes oyentes para ser monitores de este semillero. Sobre su experiencia, resalta que es muy importante la investigación para profundizar en el tema de la enseñanza a las personas Sordas. Adicionalmente, expresa que ha sido un reto la comunicación con sus compañeros, pero que siempre a través de la reflexión y de distintas estrategias encuentran la forma de interactuar, lo cual para él demuestra que, aunque son comunidades que parecen diferentes, en la UPN conviven y están juntas desde la diversidad, compartiendo por medio de herramientas que aportan a la accesibilidad del conocimiento.
Por su parte, Laura Camila Carvajal, estudiante de la Licenciatura en Educación Especial de séptimo semestre, monitora y participante de este semillero, considera que este espacio permite encontrar la diversidad en el aula, visibilizando a las Personas Sordas y a sus luchas, dando lugar al conocimiento de su sentir y de su forma de habitar dentro de la Universidad Pedagógica Nacional. Además, afirma que genera la opción de cuestionarse sobre las apuestas y los retos que actualmente plantea la educación, ante esa nueva comprensión de las diferencias y ante la necesidad urgente de recuperar la voz de quienes utilizan otra lengua.
La Casa Grande de las Maestras y los Maestros de Colombia sigue trabajando por espacios educativos que tengan en cuenta a todas y todos, sin excepción, entendiendo que la educación es un derecho que no debe ser negado a nadie, sin importar su condición.
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